viernes, 22 de julio de 2011

os debo una explicación

Desde aquel balcón del Ayuntamiento, un genial Pepe Isbert resumía el discurso vacuo y reiterativo de la autoridad municipal con el inenarrable: "como Alcalde vuestro que soy, os debo una explicación...". Me sonrío para dentro cada vez que evoco aquella imagen, que para mi coleto siempre valió mil veces más que mil palabras, con el gordo Morán asintiendo complacido a su lado en Bienvenido, mister Marshall. Lo cual apenas tiene nada que ver con lo que hoy voy a publicar, pero sirve para introducir el tema de explicar previamente el desconsiderado abandono con que castigo en verano año tras año a esta querida página, agravado ahora por la moderna actividad revolucionaria que me implica desde que tomé la Plaza de España aquí, en Rota, en compañía de otros. Entre las apreciadísimas visitas de amigos y familiares queridos a este rincón de las españas y esta indignada respuesta callejera que me ocupa, ando fatal de tiempo, además de que me siga liando con dos de pipas como acostumbro, de modo que voy a copiar y pegar a continuación un artículo que acabo de escribir a petición de la IU local para su remozada revista, en el que intento ilustrar las razones y causas de nuestro movimiento 15M y así, de paso, os lo cuento a vosotros, por si fuera de vuestro interés. Ahí va.

De Rota, la Villa, camisetas amarillas

Cuando alguno de los muchos ciudadanos que sienten curiosidad por el movimiento 15M – tan a menudo insatisfecha-, me preguntan por los contenidos de nuestras reivindicaciones, o quieren saber quiénes o cuántos somos, les suelo enseñar un papel. Un día de antes del verano, cuando las asambleas eran diarias, uno de nosotros propuso que tomáramos todos la palabra para expresar en voz alta por qué estábamos reunidos, por qué acudíamos a las asambleas. Cada uno, tras explicarse con el corazón en la mano, debía sintetizar o resumir sus razones en una palabra, y se nos ocurrió tomar nota y elaborar con ellas un árbol de palabras. Ese es el papel que muestro a los curiosos y que reproduzco aquí para que me ayude a explicarme mejor al intentar resumir qué es y qué representa la Asamblea Democracia Real Ya de Rota.

Al repasar este árbol de palabras se puede apreciar sin duda la enorme variedad de razones y motivos de los que estamos aquí. Algunos, esperanzados, otros aburridos pero todos muy hartos e indignados cada vez que comprendemos que nos la han dado con queso. Que los poderes públicos no nos representan, que no son ni actúan como pensábamos que lo hacían, que a menudo han hecho de la política, que no es otra cosa que la manera de servir mejor a las aspiraciones y necesidades de los ciudadanos, tan solo una forma de vida. Cada vez que comprobamos tal cosa, y creedme que basta con someros repasos a la prensa diaria o con apreciar los actos y declaraciones de nuestros munícipes, por mencionar algo más cercano, nos hierve la sangre, porque hemos descubierto además, en estos apenas dos meses que llevamos en la calle, que no somos conformistas.

¿Qué nos ha pasado, si hace poco más de sesenta días estábamos todos en casa enrollados con nuestros quehaceres? ¿Qué nos ha conducido a afrontar con decisión y una punta de orgullo las incomodidades de nuestra actual pelea diaria? Yo diría que dos cosas, principalmente: la decepción, por un lado, larvada en los adentros de cada uno tras años y años de esperanzas frustradas, de impotencia ante actuaciones de los políticos (tan desconcertantes como inexplicables en clave de honestidad), de asco frente a cada uno de los millares de indicios de corrupción, de rabia ante unos legisladores que ignoran por sistema al pueblo y protegen a los poderosos, de estupor ante una Banca feroz que no conoce límites en su brutal avaricia y a la que toda la clase política le baila el agua porque dependen de su dinero, que ha inventado una crisis especuladora para después aprovecharse de ella, de unos sindicatos y partidos domesticados a golpe de subvenciones y prebendas, de unas instituciones refugio de los represores de la no tan lejana dictadura..., decepción por sentirnos a menudo agraviados, despreciados y olvidados, porque nos pretendan obligar a que renunciemos a nuestros sueños de bienestar, de trabajo en paz, de justicia y libertad.

Pero, por otra parte, la enorme alegría de comprobar que no estábamos solos, que éramos miles, quizás cientos de miles, los que estábamos y estamos indignados y hartos, tanto los que nos lanzamos a tomar las calles y las plazas como los millones que nos miran con simpatía desde las encuestas, o que pasan a nuestro lado cuando nos encuentran sentados en el suelo y, simplemente, sonríen. La alegría de sentirse y saberse acompañado, rodeado, asumido, comprendido y abrazado por tantos que son tan uno como uno mismo. El bestial subidón de las concentraciones de la Puerta del Sol, el clavel reventón de la más exquisita horizontalidad y del asamblearismo más participativo e innovador, de los imprevisibles recursos organizativos surgidos de la nada, del eslógan perfecto, de las comisiones de trabajo y respeto, del dominio de las redes sociales, de la frase más acertada, del pensamiento más libre y positivo. Hacía falta una explosión como la del 15 de Mayo para asomar al mundo entero que no somos de un pueblo de bueyes y que los yugos que nos quieren poner habrán de acabar rotos sobre sus espaldas, sobre las espaldas de ellos, las de quienes han creído (desde la Europa de los falsos mercados, desde el neoliberalismo más negro, desde el capitalismo especulador, desde las covachas de los políticos pesebreros, desde las falsedades de los dueños de la información, desde su crisis esgrimida como espada de Damocles...) que podían hacer con este pueblo cualquier cosa que pretendieran.

Aquí, en Rota, tenemos unas lupas muy grandes para mirar a través de ellas cuanto digan y hagan nuestros políticos locales, unas camisetas amarillas que nos identifican cuando salimos a intervenir en todo lo que le afecta al pueblo, que es todo, y muchas ganas de que se acabe para siempre el tiempo en el que nos podían hacer de todo. Que hemos dicho ¡Basta!

Como opinión personal,
Antonio Piera
www.malablancayenbotella.blogspot.com
www.papelesparapensar.blogspot.com

Visitadnos, si queréis, en http://www.facebook.com/pages/DEMOCRACIA-REAL-YA-ROTA/125548634192586?sk=wall

miércoles, 13 de julio de 2011

ha llegado carta

"En Madrid a 12 de julio de 2011
Querido/a socio/a,
1.- Aceptar la renuncia de D. Eduardo Bautista García, relevándole de todos sus cargos en la Sociedad General de Autores y Editores y entidades filiales, quedando sujeto a las investigaciones en curso.
2.- Asumir, provisionalmente, la Junta Directiva todas las funciones ejecutivas de la entidad.
3.- Delegar en una Comisión rectora la dirección y supervisión de la gestión diaria de la organización hasta la conformación del Consejo de Dirección, designando como Presidente de la misma a un gestor externo e independiente que asuma las máximas funciones ejecutivas previstas en los Estatutos al Presidente del Consejo de Dirección. Tal designación, que ha sido ya acordado por la Junta, se comunicará en los próximos días.
4.- La Comisión Rectora iniciará inmediatamente una investigación interna encomendada a un Académico, externo e imparcial, con las más amplias facultades para examinar cualquier tipo de documentación. Su informe servirá no sólo para depurar las responsabilidades incurridas, sino para proponer un Código de Buen Gobierno que evite las concentraciones de poder. El informe se entregará a la Audiencia Nacional una vez terminado.
5.- Articular iniciativas para la renovación de la SGAE con la misión de examinar la totalidad de sus actividades y consultar con los socios las reformas estatutarias pertinentes para incrementar la democracia y transparencia, tendiendo puentes a todas las candidaturas participantes en el proceso electoral.
6.- Nombrar al Patronato de la Fundación y los órganos de Gobierno de Arteria con plenas facultades para la reforma integral de todas sus actividades. En este Consejo se integrará a miembros de todos los colectivos a fin de ampliar la reflexión a la mayor base social y consensuar un programa que goce del apoyo mayoritario de los socios. Las funciones ejecutivas en Fundación y Arteria las asumirá igualmente la misma persona designada por la Junta.
7.- La Junta Directiva quiere manifestar su agradecimiento a D. Eduardo Bautista y expresar la mayor confianza en su honorabilidad.
Un cordial saludo."

Se han dado prisa. Recién terminada la reunión y ya tenía la carta en el buzón del amail, aunque la magia electrónica no me impide ver que la habían redactado de antemano. Al estilo de la casa. Todo previsto y calculado, adobado y preparado, para engañarle a usted. ¡Qué bien!, lavaremos en casa los calostros y luego, unos polvos. De talco y a seguir que son dos días, mientras el general afila su defensa en la trastienda dispuesto a reeditar una entrada triunfal en cuanto las condiciones lo permitan. Que lo permitirán, porque para eso ha quedado intacta la estructura "legal" del aparato, al parecer no afectada por el virus de la renuncia, acaso por la consabida excusa de la obediencia debida. Esos mismos responsables legales que orquestaron e hicieron posibles todos los atropellos de la SDAE, que bendijeron cada maniobra, que arrinconaron a la oposición con argucias de leguleyo, esos colaboradores necesarios que han perseguido con saña a los incumplidores de un canon ladrón que ya es ilegal pero que lo fue siempre..., esos mismos se van de rositas, como si no hubieran roto un plato.

Tampoco se pone en duda la propia composición de una Junta surgida de la trampa y la maniobra, dándola por hecho. Algunas migajas para la oposición y vamos a tomarnos unas cañas hasta que pase la marea, aquí, tan a gustito. Ni una brizna de ética, ni una fugaz sombra de autocrítica. Hemos nombrado a un tipo consensuado para el paripé, pero nos lo callamos hasta ver el efecto de esta papela y, si cuela, seguimos con el plan. Que no es otro que trabajar para que la vida siga igual aunque, si hay que retocar algo, se retoca y ya está, que hemos venido para quedarnos. Mientras los autores y trabajadores de la cultura se preguntan cosas, nosotros tenemos las respuestas.

Mientras tanto, aquí tenéis, en bandeja de plata, la cabeza del Bautista.

lunes, 11 de julio de 2011

gato por liebre

A día de hoy, Teddy Bautista no ha dimitido todavía. Aferrado a la poltrona, como el patético personaje de Forges de aquel inolvidable disco llamado forgesound, dicen que está negociando el blindaje de su futuro con su propia Directiva aunque, conociendo el percal, más bien estarán buscando en comandita la mejor vaselina para metérnosla doblada, especialidad de la casa. Soy socio de SGAE desde cuando nos creíamos que la E era de España, hace ya un puñao de años, en plena edad de la inocencia. Cuando me enteré que era una E de Editores, tuve curiosidad por saber qué pintaban allí y qué hacían realmente los editores, y me quedé con los ojos a cuadros. Unos tipos que imponían a los autores la obligación de publicar las partituras de sus obras en alguna de sus empresas, y que se apropiaban por ello de tus posibles ingresos por autoría en porcentajes que serían grotescos si no fueran obscenos. ¿Cómo era posible que los intereses de los autores coincidieran con los de estos buitres? ¿Qué sentido tenía que corderos y lobos defendieran al unísono sus intereses?

La cosa venía de Franco vía el modelo alemán. Una sociedad privada gestionando dineros obtenidos por grises hombrecillos de gabardina y sombrero (muchos llegados directamente desde la División Azul), cuando para actuar en público había que presentar el carnet del Sindicato del Espectáculo, pasar por Censura y pagar a Autores, el tres en uno de la libertad franquista. Ya entonces había mañas entre los recaudadores, quienes preferían cobrar y que les dejaran sin rellenar la "Hoja de Autores", que ya se encargaban ellos luego de apuntar allí lo que convenía. Resultaba curioso comprobar después que, según la SGAE, recaudaban un pastón ignotos autores de desconocidas marchas militares supuestamente muy en boga en las salas de fiestas. Trampas de supervivencia, mañas de pícaro, hasta que llegó Fidel, perdón, hasta que llegó el Bautista.

Como ahora Rubalcaba pretende hacer con el PSOE, se aupó Teddy a lo más alto y modernizó la cosa sin tocar lo esencial. Eso sí, empezó a recaudar como un poseso, con lo que los socios aplaudían con las orejas el súbito incremento del tamaño del pastel. Sin tocar las estructuras, ilegales de lesa ilegalidad en cualquier Estado de Derecho, pero con la complacida anuencia del impoluto autor que, más o menos, veía incrementar su parte que me toca y, si hacía falta, se inventaba una nueva editorial para explotarse a sí mismo y, de paso, a algún colega pringao que todavía no comprendía la mecánica del pastelazo. Eso sí, mirando hacia otro lado y con el meñique enhiesto del asquito. Nada importaba que tuvieran derecho al voto menos del 10% del censo societario, ni que se implantara el canon contra el arbitrio de la UE, ni que hubiera que entrar a saco en bodas y bautizos, ni pretender el cobro a las radios y a quienes las sintonizan en un establecimiento público. Nada la mala fama de un elenco que vive del público. Ladran, luego cabalgamos, les diría don Eduardo a los viejos rockeros de su Junta, tras el obligado canto coral del ponte de rodillas.

Como la ceremonia del tío Alfredo que presenciamos ayer, todo cercanía, cordura y sensatez, por fin alguien de izquierdas para regenerar el Partido. Bienvenido el preclaro líder que va a poner firmes a los Bancos, que va a cargar de impuestos a los ricos, que va a ser más transparente que el mar hace treinta años, que bizquea de tantos guiños a los díscolos del 15M... Hay que oír a los rubalcabeños y leer sus tweets, loando sin mesura el divino advenimiento que ocurre ante nuestros propios ojos, en este instante, ahorita mismo, para comprender cuánta carne está echando el Partido para recuperar el terreno perdido. Tiemble el PP, la izquierda socialista resurge de sus cenizas.

Mientras tanto, con esa misma mano izquierda, el Ministro del Interior de Zapatero, un tal Rubalcaba, ordena desalojar a los acampados recalcitrantes, en algunos casos como en Palma con violencia, heridos y detenidos. O el Gobierno en pleno vota para dificultar el tránsito al Congreso de la dación de la vivienda como solución final en casos de impago de la hipoteca. O bien, como una piña, apoya a su Presidente en todas y cada una de las medidas de "ajuste" que empobrecen a toda la población y descargan la crisis sobre los ciudadanos recortando neoliberalmente lo poco que resta del Estado del Bienestar que tantas luchas costó o en la transferencia a las Autonomías de los últimos restos de la Sanidad pública dejando vía libre a su privatización y al doble pago que llaman copago. No puede ser que el tío Alfredo y el vicepresidente Rubalcaba sean la misma persona.

Como cantaba el otrora comprometido autor y actualmente miembro "electo" de la reciente e ilegal Junta de SGAE Jaume Sisa, emulando a Machín, yo no puedo comprender como pueden querer ser dos personas a la vez..., y no estar locos. Las cabezas de Rubalcaba y del Bautista, en una bipolaridad que les debería abrumar, necesitan de la credibilidad de los ciudadanos para explotar en su beneficio esta extraña y voluntaria esquizofrenia.

Pero no han valorado que estamos ya despiertos y que no les será tan fácil como antes engañarnos. Ya no nos dan gato por liebre. No desde que un 15 de mayo salimos a la calle para reconquistar nuestro futuro.

viernes, 1 de julio de 2011

la primera en la frente

Como la interacción está de moda, y no seré yo quien lo discuta, con esta sucinta entrada os comunico que ha visto la luz en el blog hermano, del que hablábamos ayer, la primera de las propuestas con las que amenaza la página en cuestión, en este caso centrada en los modos y maneras de coordinar las asambleas de forma que se mantengan fieles a la no representatividad y a la horizontalidad, que son las premisas básicas del movimiento popular asambleario. No es cosa sencilla si piensas que estamos ante un sistema organizativo en el que nadie manda y nadie obedece, pero que, además, funciona. Podéis repasar mi aportación en este enlace, aunque aquí os resumo el tema y me disculpo de paso por haberlo desarrollado hablando, a modo de ejemplo, de melones. Espero que nadie se de por aludido, y eso que la ovalada cucurbitácea es una de mis preferidas para iniciar las comidas veraniegas, en ensalada con su aceite, su vinagre-limón y su puntazo de sal. Cuanto más dulces y en su punto esté el melón, mejor la ensalada.

Resumiendo, el meollo está en que las asambleas locales se articulen por provincia, CCAA y Estado, pero siempre alrededor de su carácter, o bien informativo, o bien como vehículo para generalizar propuestas de las AL (asambleas locales) que pretendan abarcar ámbitos más generales. Ya lo leeréis si os apetece, pero ahora se me ocurre otro modo complementario de supraorganización provincial, en este caso para generalizar los contenidos informativos. Con periodicidad más o menos fija, una vez al mes, o cada dos meses, podría programarse una Asamblea General de la Provincia en la que todos los asamblearios provinciales que pudieran desplazarse se reunieran, cada vez en una plaza diferente de un pueblo diferente, para intercambiar experiencias, logros, dificultades, trabajos de sus comisiones e información de cualquier tipo, fortaleciendo de paso, con la presencia de todos, el movimiento asambleario de la plaza en que se reúnan y apoyando colectivamente sus iniciativas del momento. Estaría bien dotar estas asambleas de un final lúdico-festivo. Coño, estas asambleas serían el no va más.

Os dejo, que tengo que hacer un mandao.