jueves, 15 de febrero de 2007

Para echarse a temblar

La mítica Scotland Yard está probando actualmente, en Londres, unas cámaras de rayos X con las que se podrá escanear a los ciudadanos con el fin confeso de ver si son portadores de armas o explosivos, según fuentes de la propia entidad policial. Si las pruebas resultasen positivas, se procedería a su implantación generalizada en espacios y centros considerados neurálgicos (ver ilustración adjunta).
En USA, un senador prepara una Ley para prohibir a los ciudadanos circular por la calle escuchando mp3 o cualquier otro armatoste con auriculares, ya que, según argumenta, esos aparatos no les permiten escuchar los claxon o señales acústicas de advertencia de los conductores cuando cruzan las calles, con el consiguiente riesgo para su integridad física. Por suerte, al citado senador no se le ha ocurrido todavía la manera de integrar a los sordos entre los que, por su propio bien, no deberían pisar las calles.
Prefiero no sacarle más punta al tema pero, con ser ya tan grave, esto no es todo.




Según me comentan, el reciente lanzamiento del tío Gates, el afamado Windows Vista, último sistema operativo de Microsoft, está plagado de módulos de protección anticopia y de bloqueo de contenidos, parece que debidos a las presiones de entidades como la MPAA y la RIAA (tipo SGAE), con el sano objetivo de combatir la piratería. Estos sistemas, integrados en la programación básica del sistema son, al parecer, muy difíciles de cancelar, inhabilitar o rodear.
Me aseguran que el consumidor que instala Windows Vista, o compra un ordenador que lo traiga preinstalado, ya no podrá ver o grabar vídeos ni escuchar o grabar música descargados de Internet. En muchos casos, tampoco podrá hacerlo ni siquiera aunque hayas comprado legalmente el original a copiar, porque el DRM,(sistema de protección de derechos de autor), que lleva integrado no permite, por ejemplo, que te puedas pasar una canción de un DVD (comprado legalmente) a tu MP3, ni que te puedas tostar una selección de canciones de tu discoteca legalmente adquirida para el CD de tu coche o del guateque de mañana.
Aseveran además mis alarmados informadores que ni siquiera se podrá reproducir una película (comprada legalmente) en el ordenador o en cualquier medio que no sea un reproductor específico autorizado por Microsoft y los fabricantes de contenidos o que, de intentarlo, lo reproducirá con mala calidad si no lo impide.
Ruego a los lectores que sepan más que yo de todo esto, me ayuden a verificar si estas muy alarmantes informaciones son absolutamente ciertas, pues, de ser así, cabría pensárselo bien antes de adquirir este producto.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Era un rumor cuando lo estaban fabricando. De hecho, los retrasos (casi dos años) en la presentación del sistema operativo son debidos en gran parte a esos "acuerdos" y al tiempo que les ha llevado llegar a ellos. Desde luego, no es de extrañar, era el paso lógico de Bill Gates: congraciarse con los creadores de contenidos para luego comérselos.

Además, estamos hablando mucho de música, películas... pero tampoco se podrá hacer una copia de seguridad de un programa que no se haya comprado legamente y que cuestan muchos cientos de euros.

En fin... poco podremos hacer, contra Windows Vista, salvo pasarnos a linux o quedarnos obsoletos en menos de un año.